Nunca me gustó mucho seguir las reglas, hacer todo lo que me dicen, respetar lo rutinario, lo de siempre, lo que se debe, lo que es correcto, lo que vaya a quedar bien y prolijo.

Nada de eso, es más, siempre fui de hacer todo como se me cante, de oponerme a todo y a todos, de preguntar el por qué de las cosas, de buscar siempre una justificación a todo, una respuesta coherente, que me convenza.

Siempre me dio mucha repugnancia el abuso de la autoridad, del poder mal usado... del poder en sí, su concepto, lo que significa el "poder". La verdad que no me parece en lo absoluto un buen invento para los humanos... o por ahí lo es, pero como nunca nadie lo supo usar, nadie termina de entender lo que de verdad es. Y me incluyo en esas personas, porque siendo sincera, nunca vi un uso del poder bien usado al 100%.

Pero volviendo con lo de antes, siempre fui de hacer lo que quise: cuando había carteles de "se ruega no pisar el césped" yo iba y lo pisaba, caminaba por encima de los canteros de los árboles en la vereda, les sacaba los papelitos a las propagandas esas que se pegan en los postes en la calle, corría cuando el semáforo no indicaba que pueda caminar (cosa que sigo haciendo). De más está decir que siempre le peleé a los profesores, o a toda persona que se me cruce y que no diga lo correcto en cuanto a lo humano.

Ejemplo: La profesora de Geografía desde principio de año que me tiene de punto, y siempre me ve lo malo. No hay vez que me felicite, o me reconozca algo.

Cuestión que el otro día le mostramos un afiche, que lo escribió una amiga y que tenía muchas faltas de ortografía. Entonces la mujer me dice "ésto lo escribiste vos, nena?" yo sin entender pregunté "por qué?", "porque tiene muchas faltas de ortografía"... Yo creo que esa mujer todavía no me conoce lo suficiente, como para ahorrarse ese comentario, sabiendo mi reacción posterior... "por qué lo único que está mal del afiche lo tendría que haber hecho yo?. Además, tengo 10 en ortografía, así que dudo que yo haya sido la que lo escribió", le contesté en un tono no muy tranquilo, y enojadísima. Sin saber qué decir, dijo "bueno muy bien, la felicito".

ESE TIPO DE COSAS SON LAS QUE VERDADERAMENTE NO ME BANCO.

Tengo muchas ganas de seguir escirbiendo, pero la verdad es que tengo mucho sueño, son las 3:00 am (como la canción de mi dios, Charly García), y me quiero ir a dormir.

Au revoir